Ciudad de México-. Luego de que la Corte Suprema de Estados Unidos anulara la histórica ley Reo v. Wade de 1973 que garantizó las protecciones constitucionales federales del derecho al aborto para las mujeres estadounidenses, México se convierte en una opción para las mujeres de este país que deseen llevar a cabo una interrupción del embarazo.
El acceso al aborto con medicamentos es fácil y económico en México. Cruzar la frontera hacia México es familiar, anónimo, económico, rápido y no conlleva vigilancia ni juicio.
Existen motivos para preocuparse por la información y la supervisión. Un aborto médico requiere dos medicamentos, mifepristona y misoprostol. El primero se puede comprar en una farmacia en México; el segundo requiere una receta de un médico.
Para las autoridades médicas existe la preocupación de que las mujeres solo adquieran el primer medicamento y renuncien al segundo, y no reciban la atención adecuada durante todo el procedimiento.
Distintas feministas norteamericanas han advertido que si bien es una opción para muchas mujeres privilegiadas, hay un gran número de mujeres que son pobres, racializadas, vulnerables o bajo amenaza, sin embargo son las indocumentadas en la zona fronteriza las que tienen un camino más difícil.
Tedros Adhanom: “Dada la decisión del Supremo de Estados Unidos, quiero reafirmar la posición de la OMS. Todas las mujeres deben poder decidir sobre sus cuerpos y salud. Punto y final. El aborto seguro es parte de la asistencia sanitaria” https://t.co/DRe7EzMLsv
— EL PAÍS (@el_pais) June 29, 2022
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